Dice Wikipedia:
“Se conoce con el nombre de cuaderno de bitácora al libro en el que los pilotos, en sus respectivas guardias, anotan el estado de la atmósfera, los vientos que reinan, los rumbos que se hacen, la fuerza de las máquinas con que se navega o aparejo largo en los de vela, la velocidad del buque y las distancias navegadas, observaciones astronómicas para la determinación de la situación del buque, así como cuantos acontecimientos de importancia ocurran durante la navegación.”
Antiguamente, era costumbre guardar este cuaderno en el interior de la bitácora (armario o caja de madera, por lo general de forma cilíndrica o prismática) para preservarlo de las inclemencias del tiempo, y de ahí su nombre.
Dispuesto a analizar el artículo de Lorenzo García Aretio titulado Bitácoras(weblogs) y educación leo el primer párrafo en el que define las bitácoras o weblogs como “un espacio de comunicación asíncrona” y me remite a la notoria asincronía que se observa entre la imagen de la bitácora original de madera, y nuestro actual concepto en el contexto digital. Es que la comunicación que nos desvela y que ha evolucionado tanto a lo largo de la historia, mantiene su esencia de compartir información con los otros, poner en común nuestras experiencias y opiniones, a disposición de los potenciales receptores.
Este espacio digital está generalmente creado para mostrar el pensamiento escrito; donde además se pueden exhibir fotos, audios, videos, gráficos etc. Y lo más importante de todo es concientizarse que su alcance es universal.
Esta herramienta se encuentra disponible en la red, gratuita, sencilla y flexible haciendo su uso factible en el ámbito educativo.
En la diversidad de sitios creados el texto está empobrecido por vicios y malformaciones de la correcta expresión escrita cuando debería ser mas cuidadosa la escritura pensando en la heterogeneidad y diversidad de los receptores. No todo en la misma Bolsa ya que en el mundo virtual “cuando se escribe se suele objetivizar más lo que se piensa” rescata García Aretio.
Analizando las palabras, desde este lugar, cuando la calidad del texto escrito cae en un pozo expresivo es probable que sea el fruto de la velocidad y libertad que supone un espacio abierto donde el receptor es sólo una entidad invisible que no existirá hasta ver un participación activa. Es decir, el cuerpo del texto comienza a tener sentido cuando se establece la comunicación entre el editor y el receptor y es aquí donde la calidad de escritura y expresión allanan el camino de la comprensión lectora.
El estudiante se siente motivado frente a esta herramienta y logra vincularse con la misma en la expectativa de sus lectores, de las visitas que tendrá y la experiencia de compartir con otros sus ideas, pensamientos y reflexiones. Logrando un compromiso que estimula el diseño de su propio aprendizaje y, con las palabras de Aretio: “Este compartir experiencias, conocimientos, contenidos, genera esa sensación de aprender haciendo, de ser mas autor y dueño del propio proceso de aprendizaje.”
Tener un espacio libre nos vuelve vulnerables como docentes a tentaciones estudiantiles con objetivos de agudeza verbal y conflictiva. No faltarán los insultos y carencia moral expresiva que traten de mover el centro hacia otro lugar. El profesor administra los espacios moderándolos, conduciéndolos y ajustándolos en los puntos que necesite pero la Web es una fuente inagotable que asegura “domesticar” a este tipo de alumnado previsible que retarda y en lenta agonía formativa vuelve por sus pasos y así finalmente entender.
Dentro del ámbito educativo, el autor presenta una clasificación propia de los weblogs, según los autores y posibles receptores, destacando las principales aplicaciones en cada caso
a) Docentes para docentes:
-Investigación: gestión de proyectos, configuración de grupos de trabajo, muestra de resultados y tesis, publicación de artículos, críticas de publicaciones
-Docencia: Compartir y discutir contenidos, debatir el enfoque de un tema o materia, bitácoras temáticas sobre contenidos del programa o clase. Compartir innovaciones en metodología didáctica y uso de recursos. Tarea colaborativa en la elaboración de materiales curriculares. Poner a discusión artículos o comentarios o difundir sitios de Internet interesantes para algún tema en particular.
-Gestión: debate e intercambio de información sobre gestión de cursos, programas o instituciones
-Extensión: Actividades no académicas o no relacionadas directamente con los programas oficiales
b) Docentes para alumnos y viceversa:
-Administrada por el profesor permiten señalar pautas de estudios, dar avisos, observar y evaluar conductas individuales y de grupo, dar explicaciones sobre un tema en particular, generar debates,
-Los alumnos podrían discrepar, preguntar o responder al profesor y a los aportes de otros alumnos
-Facilitan al docente la evaluación continua de los alumnos
c) Alumnos para alumnos:
- Pueden ser propuestas por el profesor o autónomas de los alumnos
- Sirven para el intercambio y el trabajo colaborativo
-Hace activo el habitual papel pasivo de muchos estudiantes
Como reflexión final el autor se pregunta si las modernas plataformas educativas no suplantan o superan a los weblogs; y de la propia lectura del artículo, surge la respuesta ya que el fácil acceso y utilización de las bitácoras, las ponen al alcance de los docentes y alumnos, transformándolas en herramientas de elección en el ámbito educativo.